Este epistolario es completamente inédito. Se recogen en él sesenta y siete cartas conservadas de Carmen Martín Gaite y de Juan Benet y fechadas entre julio de 1964 y marzo de 1986. Veintidós años de correspondencia discontinua e interrumpida, crónica de una amistad que pervive a lo largo de los años. La dinámica de esta correspondencia es el gusto por la discrepancia y la discusión asumidas como reglas. Las preocupaciones existenciales de ambos autores -la incertidumbre, el amor propio, la depresión, las tres edades de la voluntad, el sentido de la propia correspondencia en curso02026;- se entrecruzan con cuestiones de sus respectivos talleres literarios -el estilo, la interlocución literaria, la literatura como juego, etc. Cartas, postales, telegramas, y algunos dibujos atrapan al lector mostrando la relación que ambos mantuvieron presidida siempre por la sinceridad, por la de capacidad crítica que exige la lealtad y por la huida del fácil elogio. 0201C;Con casi nadie me gusta hablar tanto como contigo0201D;, escribía Carmen Martín Gaite en una carta de 1973, cuando se había abierto una distancia en su asidua relación, apelando a la capacidad de entendimiento que siempre circuló entre ambos.